Fumata blanca
Título: The Abbey
Desarrolladora: Alcachofa Soft
Distribuidora: Friendware
Lanzamiento: 18 de noviembre de 2008
# Publicado el por Paco García
La aparición de una versión mejorada de Mortadelo y Filemón: Una aventura de cine (Edición Especial) en tierras alemanas (allí llamado Clever & Smart: A Movie Adventure), supuso un éxito de crítica y público nunca alcanzado en tierras españolas por Alcachofa Soft. Este reconocimiento hizo que la compañía toledana diera el pistoletazo de salida a un proyecto que se venía gestando desde los inicios de su andadura profesional: The Abbey.
Según nos comenta Emilio de Paz, la devoción que profesaban hacia el filme de Jean Jacques Annaud El nombre de la Rosa, así como al clásico de culto de Ópera Soft La abadía del crímen y, sobre todo, a la novela de Umberto Eco en la que se basa el filme homónimo mencionado, era tal, que se veían casi en la obligación de rendirles tributo jugando con esos elementos y queriendo ir un paso más allá para sorprender a aquél que creyera saberse la historia al pie de la letra. Tomando como base la novela, pero jugando con los personajes y situaciones de la misma, Alcachofa pretende crear un nuevo producto, original, pero fácilmente identificable con la famosa intriga medieval. Es por ello que por primera vez en su carrera han dejado de lado ese género humorístico del «todo vale» que siempre les ha caracterizado para centrarse en una estudiada línea argumental llena de giros inesperados, con varios misterios a resolver y enfocando la acción hacia en el sentido más puramente investigador, pero siguiendo una hoja de diseño de puzles tradicional. Habrá humor, por supuesto (estamos hablando de Alcachofa Soft), pero mucho menos acelerado que en anteriores producciones y más centrado en la situación. Para que os hagáis a la idea, podríamos hacer un símil con Grim Fandango o Discworld Noir, en base a lo que nos contaba Emilio de Paz: «Al escribir guiones siempre hemos tirado más hacia una dinámica de "gags", a ir soltando chistes en las conversaciones, en las descripciones… La premisa argumental de The Abbey es la investigación; la línea que sigue la historia se presta a un guión más fluido donde el humor se pueda encontrar en las réplicas y contrarréplicas de los diálogos de los personajes, de una manera más natural. Es un estilo diferente al que está acostumbrado nuestro público, pero os aseguro que seguirá teniendo la marca de la casa…».
Este cambio de estilo se extiende también al aspecto visual del juego. Alcachofa Soft sigue fiel a las dos dimensiones y al «cartoon», pero esta vez gracias a su nuevo motor «tridimensional» programado por Daniel Iborra se están tratando los fondos bidimensionales como si de una representación en 3D se tratara, con los típicos movimientos de grúa, «zooms», «paralax» y «travellings» que afectan a todo el escenario, aparte de efectos climatológicos como lluvia, niebla o nieve, dependiendo de la franja horaria del día en que nos encontremos durante el devenir del juego. No estamos acostumbrados a que en los juegos 2D la cámara desempeñe un papel que sobrepase lo anecdótico, pero Alcachofa está trabajando para realzar estos aspectos en su producción, haciendo uso de técnicas de planificación detalladas en la línea de las películas de animación tradicional: «La edición especial que sacamos de Una aventura de cine fue como un ensayo en lo referente a cámaras y representación. Con el nuevo motor del juego pudimos jugar un poco con "zooms" y movimientos de cámara, primeros planos… detalles que mejoran el aspecto "cinematográfico" que yo creo que debe tener una buena aventura gráfica, y que aún están por explotar. Con The Abbey nos gustaría poder hacerlo.». No sólo nos encontraremos manejando al personaje sobre la típica vista frontal estática, sino que la zona visual variará en función al desarrollo. Por poner un ejemplo, si en una escena debemos cruzar un pasillo, abrir una puerta y hablar con un personaje, la aventura estructurará toda esta secuencia mediante planos cinematográficos, así tendremos un movimiento de grúa mientras el personaje anda por el pasillo, un plano picado para mostrarnos la puerta, un plano medio al abrirla y varios primeros planos y contraplanos para la conversación. Con este tratamiento se intenta dar un desarrollo más dinámico y que la experiencia se acerque más a la de una película de animación interactiva que a lo que estamos habituados. Hemos tenido la oportunidad de echar un vistazo al muy nutrido guión gráfico del juego y estamos en disposición de afirmar que se está cuidando hasta el paroxismo la organización visual, con planos auténticamente trabajados y bien pensados, como el movimiento de cámara sobre un eje jugando con la perspectiva del fondo (que podéis ver en una de las imágenes), algo que rara vez se ha visto en una aventura gráfica de estas características (salvo, a lo mejor, en el plano inicial de Full Throttle). Obviamente, para que los personajes queden acordes con esta condición visual, han tenido que ser modelados en tres dimensiones y tratados para conseguir el «estilo dibujo animado» a la manera del mayor exponente en estas lides actualmente: Runaway. «En un principio —nos cuenta Emilio— nuestra intención era realizar todo el grueso del juego en 2D, animaciones, primeros planos, todo… Siempre hemos sido muy tajantes en estos aspectos, pero el problema es que el presupuesto ascendía astronómicamente ya no sólo sobre lo poco que podíamos asumir, sino también sobre la cantidad que cualquier productora pudiese estar interesada en ofrecernos. Con el diseño de los personajes principales ya realizado, y con sus estudios gestuales y de movimiento realizados, probamos a usar las tres dimensiones. El resultado nos pareció muy convincente y los costes se reducían muchísimo, así que nos quedamos con ello. Ahora el concepto del juego depende en muchos aspectos de la tridimensionalidad…».
Durante nuestra visita a Alcachofa Soft pudimos escuchar la alucinante banda sonora de The Abbey, grabada expresamente en Praga por la orquesta filarmónica de la ciudad, compuesta por Emilio de Paz, que se ha superado a sí mismo, orquestada por el propio De Paz y John Given (Aladdin y el príncipe de los ladrones, El retorno de Jaffar…) y bajo la batuta de Mario Klemens, un veterano director checo con un currículum vítae en el que caben desde películas españolas como Todo sobre mi madre, Abre los ojos, El maquinista o El espinazo del Diablo, hasta producciones norteamericanas como el reciente «remake» del clásico de John Carpenter Asalto a la comisaria del distrito 13. El resultado es auténticamente sobrecogedor y en algunos puntos hasta escalofriante: tómese como ejemplo el tema Siste Viator, donde un coro de 30 personas entonan la pieza en latín hasta que se da paso a una épica orquestación que parece más de una superproducción cinematográfica que de un videojuego. Cabe destacar el hecho de que las grabaciones se han realizado y mezclado en «Dolby 5.1», lo que acrecenta exponencialmente la espectacularidad de la composición.
El proyecto, como podéis apreciar, se encuentra en un avanzado estado de pre-producción y Alcachofa Soft está depositando gran parte de sus esfuerzos en llevarlo finalmente a término, aunque para los toledanos es crucial la participación económica de terceros para que el proceso siga adelante: «The Abbey no se trata de una producción cara, pero hoy por hoy el mercado está llegando a un punto en el que los estudios tienden más a la auto-financiación, y la figura del «productor» ha desaparecido del mapa. Alcachofa Soft siempre se ha movido con presupuestos muy ajustados desde que hace 12 años nos liamos la manta a la cabeza y fundamos la empresa. Hemos demostrado que podemos hacer cosas bastante decentes con muy poco dinero, quizá si tuviésemos la oportunidad de trabajar con un presupuesto de verdad los resultados fuesen sorprendentes. Pero claro, para eso hace falta el apoyo de alguna productora que esté dispuesta a invertir en una aventura gráfica y, tanto o más importante, el apoyo de un público que confíe en ti, comprando tu juego.».
El material sobre el que están trabajando, el modo en que se trabaja y lo que hemos podido ver y oír, merece esa oportunidad que reclaman y que esperemos les llegue muy pronto.